ARIZONA, USA — Una serie de ahogamientos durante las pasadas semanas ha causado preocupación a quienes abogan por la prevención de ahogamientos de que quizá este verano pudiera ser mortal.
Mientras la gente celebraba el fin de semana del 4 de julio, los bomberos se mantuvieron ocupados respondiendo a tres llamadas relacionadas con ahogamientos en el Valle.
El sábado, los bomberos de Scottsdale respondieron a una llamada en la calle 78 y McDowell Road, donde una niña de dos años casi se ahoga. El equipo de pudo hacer que volviera su pulso y fue trasladada a un hospital.
En Glendale, un niño de 3 años murió después de que lo sacaran de una alberca del patio de una casa donde estaba su familia en una fiesta el domingo. Las autoridades dijeron que de alguna manera el niño sobrepasó el cero alrededor de la alberca que estaba bajo llave.
Después, durante la misma tarde, una niña recién nacida llego al hospital en condición extremadamente critica después de que casi se ahoga en una bañera de un hotel de Phoenix.
Las autoridades dijeron que el padre les dijo que estaba bañando a la bebé, que por un momento se apartó de ella y la encontró bajo el agua cuando regreso.
Aunque las autoridades no han dado detalles relacionados con los incidentes debido a que están bajo investigación, esa tendencia actual en ahogamientos es una causa de mayor preocupación, dijo Lori Schmidt, presidenta de la Coalición de Prevención de Ahogamientos de Arizona.
“El numero de ahogamientos que estamos viendo nos pone en alerta. Estamos muy preocupados por el hecho de que la gente quizá esta siendo un poco más indiferentes de lo que debieran”, agregó.
En el 2019, la Child Safety Zone reportó 36 muertes por ahogamiento en los condados Maricopa y Pinal. De esos, cinco muertes fueron niños menores de 5 años.
En el 2020, la organización sin fines de lucro reportó un aumento en muertes por ahogamiento, 47, resultando en 14 niños de 5 años o menos.
Para prevenir futuros accidentes, Schmidt dijo que primero recomienda que cuando los niños se divierten en el agua, siempre hay que estar atentos. Si se encuentra en una fiesta, asignar a un adulto para que supervise y rotar a esa persona cada 20 minutos para que todos se mantengan seguros.
“Es difícil cuidar a los niños cuando hay una fiesta porque estamos distraídos y divirtiéndonos, pero hay que mantener esas capas de protección”, dijo Schmidt.
También es importante tener barreras alrededor de la piscina y mantener la puerta bajo llave. Asegurarse que no hay objetos alrededor del cerco que pudieran ayudar a los niños a tener acceso a la llave de una alberca que no es supervisada.
Para nadadores que no tiene experiencia, el usar un chaleco salvavidas debe ser prioridad. Los flotadores no cuentan como salvavidas dijo Schmidt. Esos son juguetes.
El grupo de entre 1 y 4 años son los más propensos a ahgarse, fueron un 58% de las muertes en el 2014, según Child Fatality Review.
El factor principal para prevenir ahogamiento es saber nadar, los niños pueden aprender tan pequeños como de un año. El Departamento de Servicios de Salud de Arizona tiene una lista de ciudades que proveen clases de natación gratuitas o a un precio reducido.
“Si continuamos en la misma dirección que hemos ido durante las últimas semanas, podríamos tener un verano muy malo, dijo Schmidt.