PHOENIX — El mismo día que George Floyd murió a manos del expolicía Dereck Chauvin, un controversial caso de uso de fuerza acontecía en Phoenix.
A las pocas horas del Día Memorial del 2020, el policía estatal George Cervantes quien conducía su motocicleta de la agencia se acercó a un vehículo que estaba estacionado obstruyendo parte de la carretera 101 cerca de Tatum.
La parada eventualmente llevaría a Cervantes a disparar y matar al hombre en el asiento del chofer del auto, Dion Johnson, quien sería el centro de las protestas en el Valle al mismo tiempo que se llevaban a cabo protestas por George Floyd.
“Todavía no hay responsabilidad”, dice Jenelle Wood, a casi 11 meses después de la muerte de Johnson.
Wood estaba poniendo atención muy de cerca el martes, después de que el jurado llegara al veredicto del juicio de Derek Chauvin. Chauvin fue encontrado culpable de todos los cargos, incluyendo asesinato en segundo grado, asesinato en tercer grado y homicidio culposo.
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“Muy, muy tranquila de ver que el jurado miró lo que todo el mundo vio”, dice Wood. “Vimos un asesinato. Ellos vieron lo mismo”.
Ella fundó el Fórum de Madres Negras (Black Mothers Forum) en Phoenix, un grupo que en parte trabaja con familias como la de George Floyd. Familiares de quienes murieron a manos de la policía. Familias como la de Dion Johnson.
“Por primera vez creo que eso sacudió a muchos estadounidenses porque mucha gente decía, ‘eso no está bien y deveras necesitamos hacer algo al respecto’”.
Ella dice que todavía hay trabajo por hacer, incluyendo en el caso de Johnson.
En mayo, cuando Cervantes se acercó a la ventana del chofer, dice que miró un contenedor de alcohol abierto y un arma en el carro del sospechoso.
Cervantes dijo a los investigadores que él removió el arma y que iba a arrestar a Johnson por conducir bajo la influencia. Cuando Johnson despertó y trató de luchar con él.
Cervantes dijo que temía ser arrojado al tráfico, así que disparó su arma dos veces.
En ese tiempo DPS no tenía cámaras corporales para sus oficiales, pero ADOT tenía cámaras de tráfico y los oficiales que respondieron de otros departamentos tenían sus cámaras que capturaron los momentos después de la balacera.
Otras agencias del orden que respondieron si tenían cámaras corporales, incluyendo video de la policía de Scottsdale que mostró a Cervantes y a otro policía estatal que respondió, brindando ayuda a Dion Johnson.
Cervantes le dijo al oficial de Scottsdale que disparó dos tiros y que el segundo debió de haber rosado a Johnson.
La familia de Johnson y el abogado en ese tiempo expresaron preocupación sobre la falta de video mostrando exactamente lo que había pasado.
“Ese es el problema”, dijo Wood. “Si no tienes las imágenes para probarlo, siempre quedará en el aire del lado de que los oficiales hicieron lo que se suponía deberían de hacer o de alguna manera esa persona lo merecía”.
Testigo y video de la cámara corporal fueron cruciales en el caso de George Floyd y el juicio de Derek Chauvin. La policía de Minneapolis originalmente dijo que murió de un “incidente médico” hasta que el video salió mostrando lo otra cosa.
A principios de este año, DPS. dijo que 150 de sus policías estatales estaban equipados con cámaras corporales de prueba. Un vocero dijo que 75 policías estatales tenían cámaras de Axon y 75 de Watchguard. El periodo de prueba quizá continué hasta finales del año fiscal, el cual termina en junio.
El gobernador Doug Ducey ha pedido que todos los policías estatales sean equipados con cámaras corporales. Los fondos para las cámaras para todos ellos es parte de una legislación estatal y de una propuesta del presupuesto del estado.
En el momento de la balacera, Johnson tenía orden de arresto por un delito menor. Documentos judiciales muestran que Cervantes no sabía quién era Johnson ni su historial antes de la balacera.
Documentos judiciales de la oficina del fiscal del Condado Maricopa muestran detalles sobre arrestos previos de Johnson, incluyendo acusaciones de peleas con su familia y asalto a una de sus exnovias.
Johnson también pasó tiempo en prisión por asalto a mano armada y asalto agravado. Johnson también esta enlistado como un “conocido miembro de pandilla”.
Referente al policía estatal, Cervantes tiene su propio récord con DPS. En sus 15 años con el departamento, documentos muestran que ha habido 13 quejas en contra de él. Algunas fueron sin fundamentos, pero fue disciplinado por otras, entre ellas el usar su pistola eléctrica de DPS con el perro de la familia.
En septiembre, Allister Adel, fiscal del condado anunció que su oficina no imputaría cargos criminales en contra de Cervantes.
Referente a la investigación interna de Cervantes, DPS confirmó el martes que habían finalizado la investigación. DPS. dijo que Cervantes todavía es un empleado de DPS y que actualmente se encuentra aún en “ausencia industrial” pero no elaboraron en lo que eso significa.
La familia de Dion Johnson desde entonces ha contratado a un nuevo abogado. Su nuevo abogado no respondió a 12 News para dar comentario hasta el martes.