PHOENIX — La policía logró capturar a dos prófugos que se habían escapado de la prisión de Arizona en Florence. Un hombre de Coolidge relata lo que pasó cuando el llegó a casa y los fugitivos estaban allí.
John Carpiot y David Harmon fueron contabilizados en esa prisión fue a las 4 p.m. del sábado por la tarde y desparecieron de prisión para el conteo de las 8:30 p.m.
Ambos fueron vistos el mismo sábado intentando robar un negocio en Florence.
Luis Álvarez de Coolidge dijo que haberse enterado de que los reclusos se habían escapado, pero que él no sabía que andaban por esa área y menos se imaginaba que iban a llegar a su casa ese jueves por la mañana.
“Escuché unos gritos de mi esposa, yo andaba trabajando en los files [campo]. Inmediatamente me vine a la casa. La sorpresa que me lleve es que estaban esos dos hombres que se habían escapado de la prisión aquí con mi esposa golpeándola” dijo Álvarez.
Los hombres la golpearon exigiendo que les diera dinero y las llaves de su camioneta.
Sin pensar y como pudo, Álvarez dijo que sacó a los hombres y al no escuchar ya a su esposa, le pasó por la mente que la habían matado dentro de la casa.
Luchó contra los hombres.
“Dios me dio muchas fuerzas y me los quitaba. Yo nunca me acobardé hasta que ya se acabo eso, es cuando me comenzó a dar miedo”, relató Álvarez.
Pero ya afuera, los dos reclusos prófugos de la justicia corrieron rumbo a los campos de siembra en el área.
Álvarez corrió detrás de ellos tratado de detenerlo.
“Cuando empezaron a correr para el fil, ellos empezaron a vomitar, ya no pudieron correr. Fue cundo yo les salí adelante y les dije que no se fueran”, dice Álvarez.
Al mismo tiempo que iba corriendo detrás de ellos en el campo abierto, llamó a la policía, ellos llegaron rápidamente y lograron atrapar a los dos prófugos.
La esposa de Álvarez fue atendida en la sala de emergencia de un hospital. Ya esta re regreso en casa donde termina de recuperarse física y emocionalmente.
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