PHOENIX — Una familia del Valle finalmente puede dar un suspiro de alivio, después de que su ser querido, Moisés Ramírez Loza, estuviera en el hospital durante meses sufriendo una condición médica tras otra, incluso estuvo sin moverse durante 12 minutos mientras luchaba contra el virus del COVID-19.
“Lo mejor, ya sabes, estar con mi familia es la mejor medicina”, dijo Loza.
Está muy feliz de estar en casa después de luchar contra el coronavirus desde una cama de hospital durante más de dos meses.
“Me siento mucho mejor, me siento tan fresco y tan cómodo”, dijo.
El hombre de 56 años de edad y padre de cinco hijos, está agradecido de que su familia se haya quedado con él en la pelea desde el primer día.
“No te asustes, está bien, estamos aquí para ti, no nos hemos apartado de tu lado”, dijo su hija.
“Mi familia, todos juntos, mis nietos, mis hijos, mi esposa, mis hijas”, dijo Loza.
La gente, que acampó fuera de la ventana de su hospital esperando una recuperación milagrosa.
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“Tuvo fiebre y convulsiones y terminó sin moverse durante 12 minutos”, agregó su hija.
A pesar de que Loza sufrió cierta pérdida de memoria y aún experimenta mareos, está decidido a seguir las órdenes del médico.
“Hago mis terapias y mi diálisis y trato de vivir mi vida normal”, dijo.
Su consejo para otros que intentan superar COVID-19 es simple.
“Ore y ore por otras personas que se están enfermando, fortalezca y tenga mucha fe en Dios”, dijo Loza.