PHOENIX — Las rescatistas de animales Kimberly Elliott y Sonia Venecia no sabían lo que les esperaba cuando dejaron a dos perros con necesidades especiales, de nombre Butters y Checo, al cuidado de April McLaughlin.
McLaughlin había estado dirigiendo una operación de acogida para perros con necesidades especiales, dijeron grupos de rescate locales. Pero lo que le esperaba dentro de su casa en Chandler era la peor pesadilla cualquier dueño de un perro.
La policía de Chandler allanó la casa de McLaughlin en septiembre después de que se supo que había estado recogiendo a más de 50 perros, obligando a los animales a vivir en condiciones deplorables.
Después de una breve lucha en los tribunales, los perros se reunirán con sus dueños de nueva cuenta.
El jueves Elliott y Venecia, ambos fundadores de grupos de rescate de animales, pudieron ver a Butters y Checo.
"Me siento aliviada de que ya no esté confundido ni asustado", dijo Elliott.
Butters está parcialmente paralizado y fue sacado en camilla por trabajadores de la Arizona Humane Society. Tanto Elliott como Venecia no pudieron evitar llorar cuando lo vieron.
Aunque Butters sonreía en su "cono de la vergüenza", se veía muy diferente a la última vez que lo vieron.
"El querido Butters está tan flaco en este momento que me rompe el corazón", dijo Elliott.
Butters, Checo y otros 58 animalitos estaban en el hogar de McLaughlin y vivían en condiciones horribles.
La policía de Chandler dijo que cinco de los perros fueron encontrados muertos en un congelador.
Los animales restantes fueron rescatados y llevados a Arizona Humane Society para recibir tratamiento. Desafortunadamente, algunos tuvieron que ser sacrificados.
"Estos perros llegaron en muy, muy malas condiciones", compartió el doctor Steven Hansen, presidente y director ejecutivo de Humane Society.
"Aún les queda un largo camino por recorrer, pero están limpios y sus heridas están empezando a sanar".
Mclaughlin, que tiene varios alias, incluido Sydney McKinnley, estuvo en la corte el miércoles pidiendo que le devolvieran 13 perros, pero el juez de la ciudad de Chandler denegó su solicitud. El juez determinó que los perros se encontraban en condiciones "inaceptables".
McLaughlin inicialmente solicitó recuperar los 47 perros vivos que fueron incautados por la policía, pero luego redujo su solicitud a solo 13 perros que, según ella, habían estado bajo su cuidado durante muchos años.
Ahora, algunos de los perros están comenzando a ser devueltos a sus dueños u otros grupos de rescate. Hansen dijo que ahora están trabajando para reunir a 34 perros que fueron sacados de la casa.
"Habrá muchas más reuniones en los próximos días", dijo Hansen.
"Estoy muy emocionada al saber que todos y cada uno de los perros pronto recibirán esa atención compasiva", aseveró Elliott.
Sin embargo, los 13 perros implicados en el proceso judicial tendrán que quedarse por ahora. McLaughlin tiene dos semanas para apelar la decisión del juez. Hansen espera que eso suceda.
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