WASHINGTON — Moderna anunció el jueves que están trabajando en una vacuna de una dosis que serviría como dosis de refuerzo contra el COVID-19 y a su vez ofrecería protección para la influenza estacional.
La empresa esta llamando a la vacuna en desarrollo, mRNA-1073.
“Hoy estamos anunciando el primer paso en nuestro innovador programa de la vacuna respiratoria con el desarrollo de una vacuna de una sola dosis que combina un refuerzo en contra del COVID-19 y un refuerzo en contra del flu”, dijo el presidente de Moderna por medio de un comunicado. “Creemos que nuestra plataforma mRNA puede resolver los más grandes obstáculos de salud en el mundo, desde las enfermedades que afectan a millones hasta las enfermedades ultra raras que afecta a docenas, hasta medicinas personalizadas para un nivel individual”.
Funcionarios de Estados Unidos siguen con planes de empezar a administrar la dosis de refuerzo de las vacunas mRNA COVID-19 para ofrecer protección extra en contra de la variante del virus delta la cual es la más contagiosa.
El mes pasado Biden anunció sus planes en que estuviera disponible para el 20 de septiembre, pero es muy probable que la vacuna Pfizer sea la única que reciba aprobación regulatoria para una tercera dosis para entonces. Reguladores federales están en busca de informacion adicional de parte de Moderna que probablemente retrase la aprobación hasta octubre.
Funcionarios de los Estados Unidos tienen como meta administrar las vacunas de dosis de refuerzo alrededor de ocho meses después de segunda dosis de las vacunas de dos dosis.
El miércoles, Tedros Adhanom Ghebreyesus director general de la Organización Mundial de la Salud pidió a los países que están ofreciendo dosis de refuerzo a que pararan de hacerlo para que los demás países que enfrentan escasez tengan oportunidad de ponerse al corriente.
“No me quedaré en silencio cuando empresas y países que controlan el suministro global de vacunas piensan que los pobres del mundo deben estar satisfechos con las sobras”, dijo en una conferencia de prensa. “Debido a que los fabricantes han dado prioridad o han sido legalmente obligados a satisfacer acuerdos bilaterales con los países ricos que están dispuestos a pagar más dinero, los países de bajos recursos han sido desfavorecidos de herramientas para proteger a su gente”.
La Prensa Asociada ha contribuido con este reporte.